Hacer la tarea es hacer un trabajo, y no hay forma de evitar este hecho. Es un trabajo tanto para el niño como para los padres, por eso es importante entender que el trabajo escolar es a menudo la parte más difícil de las cosas que tiene que cumplir su hijo.
El ayudar a un hijo o a una hija a manejar esto a pesar de todas las otras actividades que preferiría estar haciendo es un gran desafío.
Recuerde que el trabajo de su hijo es ir al colegio y aprender, y esto incluye terminar a tiempo las tareas que le dejan para entregarlas en la fecha indicada.
Pero, ¿Por qué mi hijo no quiere hacer la tarea?
No se han establecido responsabilidades
Se tiene que hacer saber al hijo o hija que usted espera que realice el trabajo a tiempo y en la medida de sus capacidades, lo que implica la importancia de ello teniendo en cuenta que lo más importante es que hagan todo lo posible por hacerlo. Entienda que los niños son diferentes en cuanto a cómo se sienten acerca de hacer tareas. Algunos pueden encontrar el inglés fácil, pero otros se sienten realmente frustrados, porque no todos tenemos las mismas condiciones y habilidades para hacer algo específico.
No existe ninguna orientación
Algunos niños o niñas necesitan un guía; otros necesitan un acompañante, mientras que otros necesitan más orientación práctica para completar sus tareas.
Trate de hacer coincidir su ayuda con lo que más necesita su hijo. Recuerde que su hijo está realizando su tarea como una tarea escolar.
Por ejemplo, en el colegio el profesor será el juez de cuán bueno o malo es el trabajo realizado, y en la casa usted no es responsable del trabajo en sí, pero sí tiene una responsabilidad, la de guiar a su hijo para que él mismo realice sus propias tareas. Siempre puede hacer sugerencias, pero al final es responsabilidad de su hijo o hija hacer sus tareas y el trabajo del profesor es calificarlas.
No se usan refuerzos positivos
Es muy importante reforzar siempre el comportamiento positivo, y eso significa ofrecer algún tipo de estímulo para completar sus tareas y obtener buenas calificaciones.
La mayoría de los niños obtienen satisfacción personal al obtener buenas calificaciones y completar su trabajo, y eso es lo que buscamos, pero, también es beneficioso ofrecer algunos incentivos para alentarlos a seguir adelante.